sábado, 4 de enero de 2014

HUGO


Padre,
con tus cumplidos,
con tus fallas,
con tus manos arrugadas.

Padre,
con tu andar cansado,
tus dolores de espalda
y tus viejas gafas.

Padre, si se decir padre,
es por preocuparte,
alegrarte, agobiarte,
y seguir adelante.

Padre,
si soy un hijo ingrato,
si soy tu orgullo o vergüenza,
si por mi pierdas la vida o la cabeza.

Padre tan ausente de palabras
como presente en la mente;
un diálogo silencioso y abundante
nos comparte, une y reparte.

Padre, complejo definirte,
sencillo situarte,
en lo profundo del margen
entre el amor y el coraje.

Padre
¿me perdonas?
¿me ignoras?
¿me recuerdas en horas?

Padre tan indiferente,
frío, arrogante, terco,
amable, cálido, perseverante;
tan contrario y tan semejante.

¡Oh padre!
eres mi orgullo y eres mi pena
¡Oh padre! ¡Querido padre!
Te odio tanto como he llegado a amarte.

Alex G.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

No tienes que tener cuenta. Usa Open Id o anónimo.