NAVEGANTE

Soy un alma vaga,

de corazon en tierra plantado.

Soy el ave de playa,

que al llegar al sol descansa en su regazo.

Puedo escuchar el viento cantando,

mientras observo atento invisibles detalles,

es el susurro coqueto que va marchando,

es la marea inquieta de celestiales amantes.

La distancia lleva el aura en su mano,

es el aura del tiempo,
tiempo lejano enemigo,
tiempo amigo de errores saldados.

Errores sometidos a juicio injusto,
culpas cargadas esperaron pacientes,
muertas vagaban fantasmas en luto,

trazadas ahora en la arena descansan alegres.

Miedos y dudas nuevos males forasteros,

resistencia que fuerza arrogante a olvidar.

Me convierte en cobarde que encandila con verdad,

peor que el oscuro mentiroso del silencio.

Yo soy ahora navegante de nuevos comienzos,

en barco viejo y de raices fuertes.

De sueños rotos y nuevos son los mares,

de ellos yo soy el viento puro y puro sentimiento.

Lex.